Las bendiciones de tener templos en el caribe

Imagenes de los templos Área del Caribe

Los templos nos brindan propósito a nuestras vidas. Trae paz a nuestras almas -- no la paz que ofrecen los hombres-- sino la paz que prometió el Hijo de Dios cuando dijo: “La paz os dejo, mi paz os doy”. No creo que haya lugar en el mundo en el que me sienta más cerca del Señor que en uno de Sus santos templos.

En el templo nos enseñan el preciado plan de Dios. Es en el templo donde se hacen convenios eternos. El templo nos eleva, nos exalta y se erige como un faro a la vista de todos, señalándonos el camino hacia la gloria celestial. Es la Casa de Dios. Todo lo que sucede en el interior del templo edifica y ennoblece. -- Presidente Thomas S. Monson

Estado actual y funcionamiento de los templos del caribe

El Templo de Santo Domingo

El Templo de Santo Domingo fue dedicado (inauguración) el 17 de septiembre del 2000, desde entonces ha sido un faro de luz y un espacio de paz para los miles de Santos en el Caribe.

Como parte de su mantenimiento a largo plazo, los templos son remozados y sufren transformaciones importantes aproximadamente cada 20 ó 25 años, según las condiciones del lugar lo permitan. Por esta razón desde el lunes, 1 de agosto de 2022 hasta el viernes, 2 de diciembre de 2022 el templo cerrará sus operaciones.

Para los miembros de la Iglesia, el templo no es un lugar secreto, sino más bien sagrado, y aunque el acceso a su interior está sujeto a determinados términos y condiciones de preparación personal, incluido el bautismo en la Iglesia, los líderes de la Iglesia han establecido que cualquier persona que desee, si cumple con las condiciones establecidas para tales fines, puede prepararse y algún día entrar al templo y participar en las actividades que allí se realizan.

Templo de Port-au-Prince

El Templo de Port-au-Prince entró nuevamente en pleno funcionamiento el 31 de mayo 2022, todas las ordenanzas están disponibles con cita previa. Los miembros de la Iglesia sin cita siempre son bienvenidos a participar en las ordenanzas del templo, la mascarilla no es obligatoria.

El Templo está operando cuatro días a la semana, de 8:00 am a 4:00 pm, programa seis sesiones de investidura semanales, dos sesiones de bautismo diarias, sellamiento vicario dos veces al día e iniciación todos los días. Los miembros que sirven como obreros de las ordenanzas continúan confiando en el Señor mientras adoran y sirven en las ordenanzas del templo por sí mismos o en favor de las personas fallecidas. Los viernes y sábados siguen siendo los días en los que el templo recibe más miembros.

Como cualquier otra persona que vive en Haití, los santos haitianos no están exentos de las consecuencias de las crisis políticas, sociales y económicas en curso, que afectan incesantemente a la población. Sin embargo, entre los miembros se ve un esfuerzo cada vez mayor por participar en las ordenanzas del templo. Viniendo del Sur, del Norte y de zonas del Oeste, atravesando zonas peligrosas para llegar a la Casa del Señor. No les preguntamos sobre las razones por las que vienen al templo, sin embargo, cada vez que llegan al templo, sus rostros expresan no solo que reconocen que están en la Casa del Señor, sino que también buscan consuelo y paz. Por lo tanto, alineado con el Departamento del Templo, la meta del liderazgo del templo es asegurar de que cada miembro que cruce el umbral del templo obtenga una experiencia maravillosa y edificante en la Casa del Señor.

Templo de Puerto Rico (En construcción)

¿Qué significa tener un Templo para los Santos en Puerto Rico?

Desde que el presidente Russell M. Nelson anunció la construcción del Templo en Puerto Rico, muchos miembros se conmovieron con la noticia y se llenaron de alegría y felicidad en sus corazones.

Uno de los desafíos más grandes de muchas familias para asistir a un templo, era el no tener los recursos necesarios para viajar con toda la familia a los países cercanos, pero al comenzar la construcción ya hay esperanza de hacer las ordenanzas sagradas de bautismos por los muertos, sellamientos como familia, casamiento por las eternidades.

“Recuerdo ese momento sentado escuchando la conferencia junto con mi familia, y para la gran sorpresa, emoción y alegría supimos que nuestro Templo sería construido, nuestros ojos se llenaron de lágrimas de felicidad y agradecimos a Dios por esa gran bendición; sé que nuestras oraciones fueron contestadas en el debido momento y las oraciones de muchos hermanos que a través de los años hemos trabajado fuerte en esta gran obra” --- Hna. Jeisa Marit Vázquez Reyes.

“Realmente es una bendición para nosotros como familia, saber que podemos hacer convenios con Nuestro Padre Celestial aquí en nuestra isla, el Señor nos ha bendecido y es un privilegio tener un Templo en nuestra isla” “Podemos hacer convenios para esta vida y por la eternidad, somos muy bendecidos por tener un pedacito de cielo aquí en Puerto Rico” --- Familia Rivera Puig

“La construcción del Templo en nuestra área nos trae la bendición más grande, la de acercarnos a la vida eterna, nos brinda la oportunidad de trabajar haciendo obras por nosotros y nuestros antepasados.” “Hay muchas familias que desean ser selladas y otras personas quieren hacer obras por sus antepasados y es un gran privilegio para cada uno de nosotros” --- Familia Rivera Soto

El Templo de San Juan, Puerto Rico, es el tercer templo en el área del Caribe, no solamente beneficiará a los miembros de la Iglesia, si no que bendecirá a toda la comunidad.

“Este edificio será de mucho beneficio para las personas, en especial para todos los grupos religiosos aquí en Puerto Rico”. --- Imán Ahmad Salman, Líder comunidad musulmana Ahmada.

Ese espacio que el templo representa de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Dias, sin duda, para mí que soy un creyente católico, me es un motivo de profunda alegría” --- Padre Carlos Pérez, Sacerdote Católico.

“Mejores cosas vienen para la gente de Puerto Rico, sabiendo que los mejores días están por venir para ustedes y para sus familias” --- presidente Russell M. Nelson (Última Visita a Puerto Rico después de los Huracanes Irma y María).