Santo Domingo Este, R.D. — Con una emotiva ceremonia cargada de espiritualidad, música inspiradora y mensajes edificantes, la Estaca Las Américas de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días celebró el domingo 6 de julio del 2025 su esperada graduación del programa de Seminarios.
En la reunión fueron reconocidos por sus esfuerzos decenas de jóvenes: algunos por ser constantes y dedicados al estudio diario de las Escrituras por 4 años, y otros por finalización de curso del libro Doctrina y Convenios.
El acto, presidido por el presidente de estaca Víctor Manuel Liriano y dirigido por el hermano Nilson Jiménez, primer consejero de la presidencia de estaca, reunió a líderes eclesiásticos, familiares, maestros y representantes del Sistema Educativo de la Iglesia, para honrar a los estudiantes que completaron su formación espiritual durante los últimos años.
La apertura se realizó con el himno “Andaré con Cristo” y una oración ofrecida por la graduanda Siarah Dilenis Chala Cuesta, de Brisa del Este.

El programa incluyó inspiradores discursos a cargo de graduandos como Yaribelkis Boyer Suárez, Israel Vicente Sabala Montes de Oca, Josué Joaquín Santana Florentino y Shanelle Nathalia Velóz Martínez, quienes compartieron sus testimonios y experiencias vividas durante su paso por Seminario.
La maestra de Los Molinos, Ivelisse Henríquez, ofreció un mensaje especial sobre el valor de la participación constante en el programa, destacando cómo el estudio del Evangelio fortalece la fe, la obediencia y el deseo de seguir a Jesucristo.
El Coordinador de Seminarios e Institutos, Jhon López, dirigió unas palabras en representación del Sistema Educativo de la Iglesia, resaltando la importancia de este logro en la vida de los jóvenes y exhortándolos a continuar en el Instituto.
El evento culminó con un discurso central del presidente de estaca, Víctor Manuel Liriano, seguido de la entrega de diplomas y certificados a los jóvenes que completaron los cursos de seminario.
El cierre musical estuvo a cargo del himno “Fuentes de mis bendiciones” y la oración final fue ofrecida por Ismael Vicente Montaño Jiménez, de Los Frailes 2. Los alumnos graduados representaron a los barrios de Boca Chica, Brisas del Este, La Caleta, La Llave, Los Frailes, Los Molinos y Valiente, contando con el acompañamiento de sus maestros y líderes locales.
Entre los nombres destacados se encuentran: Fred Michel Alexandre, Samanta Paulino Frías, Brittany Stacey Díaz Medina, Josué Joaquín Santana Florentino, Geveyri Patricia Castro Contreras, entre otros.
Este acto reafirma el compromiso de los jóvenes santos de los últimos días con los principios del Evangelio de Jesucristo y su deseo de ser una luz en medio del mundo, al igual que su determinación de prepararse espiritualmente para su futuro familiar, profesional y misional.
La jornada finalizó con un espacio para fotografías y abrazos, en el que se percibía el gozo y la gratitud de una juventud valiente, consagrada y llena de esperanza. En la actividad solemne estuvieron presentes los obispos de los barrios que integran la estaca Las Américas, además de la supervisora de seminario de Seminarios e Institutos, Leidy Rodríguez, familiares de los graduandos y las maestras y maestros de la organización.
Cabe destacar que cada año la iglesia publica en su página web, y redes sociales cuál de los cuatro libros canonicos estudiaran los jóvenes seminaristas, Docttrina y Convernios, el Antiguo Testamento, el Nuevo Testamento, y el Libro de Mormón.
El Seminario es un programa diario de estudio del Evangelio dirigido a jóvenes de 14 a 18 años, impartido por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Su objetivo es fortalecer la fe en Jesucristo, enseñar principios del Evangelio y ayudar a los jóvenes a tomar decisiones correctas en un mundo cada vez más desafiante.
A través del estudio de las Escrituras y la guía de maestros inspirados, los estudiantes desarrollan carácter, liderazgo y preparación espiritual para la misión, la vida familiar y profesional. Graduarse del Seminario representa un logro espiritual significativo y una base sólida para el futuro.