El Libro de Mormón es la palabra de Dios. Como la Biblia, es Escritura santa. Es un registro del trato de Dios con los antiguos habitantes de las Américas y contiene la plenitud del Evangelio sempiterno. El libro lo escribieron muchos profetas antiguos mediante el espíritu de profecía y revelación. Sus palabras, escritas en planchas de oro, fueron citadas y compendiadas por un profeta historiador llamado Mormón.
El evento culminante del Libro de Mormón es el ministerio personal del Señor Jesucristo entre los nefitas poco después de Su resurrección. En este libro se presentan las doctrinas del Evangelio, describe el plan de salvación, e indica a todos lo que deben hacer para obtener la paz en esta vida y la salvación eterna en la vida venidera.
A su tiempo, se le entregaron las planchas a José Smith, quien las tradujo por el don y el poder de Dios.
Ahora ese registro se publica en muchos idiomas como un testigo nuevo y adicional de que Jesucristo es el Hijo del Dios viviente y que todos los que vengan a Él y obedezcan las leyes y ordenanzas de Su evangelio pueden ser salvos.
Invitamos a toda persona, dondequiera que se encuentre, a leer el Libro de Mormón, a meditar en su corazón el mensaje que contiene y luego a preguntar a Dios, el Eterno Padre, en el nombre de Cristo, si el libro es verdadero. Quienes así lo hagan y pidan con fe lograrán un testimonio de la veracidad y divinidad del libro por el poder del Espíritu Santo.